¿Qué pasa si se moja mi vape? Sabemos que probablemente tu vape te acompaña a todas partes y en todo momento.
Por eso, no es raro preguntarse qué pasa si se moja mi vape, ya que existe la posibilidad de que en algún momento lo dejes caer en agua por accidente. No hay por qué sentirse mal, a todos nos ha pasado alguna vez.
El problema con mojar/dejar caer tu vape al agua es que existe una alta probabilidad de daño permanente, sin embargo en algunos casos, puede haber esperanza de salvarlo.
Aquí te compartimos algunos tips para intentar resucitarlo antes de tirarlo a la basura:
¿Qué ocurre al momento del contacto con el agua?
- El agua, naturalmente al ser conductor de electricidad podría facilitar un corto-circuito. Debido a la alta probabilidad que esto ocurra, no deberías intentar usar un vape que acaba de salir del agua.
- El agua también podría generar un efecto corrosivo en los componentes metálicos al interior del vape. Al contrario del punto anterior (corto-circuito), la corrosión es más un problema a largo plazo que podría no afectar necesariamente el rendimiento del dispositivo inmediatamente pero sí en un par de días/semanas.
Vaporizadores desechables ¿Cuánto duran?
Teniendo esto en cuenta, aquí van 3 consejos que podrías aplicar si te ves envuelto en esta situación:
- Retira el producto del agua inmediatamente. Si estás con suerte, podrías alcanzar a hacerlo justo antes que el agua llegue a los componentes internos.
- Si tu dispositivo es un mod (desarmable), separa todas sus partes en especial la batería.
- No intentes usarlo enseguida. Sacúdelo fuertemente para retirar cualquier gota extra que pueda tener.
- Si es desechable, intenta soplar en la parte inferior del dispositivo para verificar que no quede agua en el interior.
- Lleva tu dispositivo a un entorno que pueda extraer lo que le queda de agua: un ventilador, arroz, bolsas deshumidificadores (silica) o inclusive la arena de tu gato harán la tarea.
Si después de seguir todos los pasos tu vape aún presenta fallas o un comportamiento extraño, lo mejor es no arriesgarse. Ruidos inusuales, calentamiento excesivo, fugas o falta de respuesta al encender pueden ser señales de daño interno irreversible, especialmente si el dispositivo se ha mojado por completo.
En estos casos, lo más recomendable es suspender su uso inmediatamente y optar por desecharlo de forma segura, siguiendo las indicaciones de reciclaje de dispositivos electrónicos si están disponibles en tu ciudad.
Forzar el funcionamiento de un vaporizador dañado puede representar un riesgo para tu salud, ya sea por un cortocircuito, liberación de sustancias tóxicas o incluso quemaduras accidentales. Si tienes dudas sobre su estado, siempre es preferible consultar con un especialista o con el soporte técnico del fabricante, en lugar de continuar usándolo.